Hoy es un día importante para Chelys Odalys, en este día cerramos una etapa que ha durado unos cinco años, para abrir otra que esperamos esté llena de proyectos.
Héctor, en el centro, acompañado de los directores Hugo Escobar y Eduardo García. |
Y es que Héctor Rodríguez de Armas se despide de nosotras para poder centrarse en su carrera profesional, que en los últimos tiempos ha ido creciendo de manera espectacular. Las chelynas no podemos hacer otra cosa que desearle TODO LO MEJOR, muchos éxitos profesionales y personales, que es ¡lo que se merece!
Si de cada persona con la que compartimos el camino nos tenemos que quedar con aquello que nos ha enseñado, de Héctor recordaremos innumerables experiencias... a creer en nuestro potencial, a mejorar poco a poco, a mantener la sonrisa en las actuaciones, muchísimas anécdotas y todavía más risas.
Es por todo ello que no podemos estar tristes, ESTAMOS AGRADECIDAS. Aunque sabemos que nuestros caminos se volverán a cruzar, y PRONTO.
El espectáculo debe continuar...
...y la historia chelyna tiene muchos capítulos por escribir. Así que, rápidamente, comenzamos la búsqueda de una nueva "batuta" que nos guíe hacia nuevos retos y, esperamos, muchos éxitos. Y es que, como en el ciclo de la vida que da título a esta entrada, hay despedidas pero también hay bienvenidas.
En este caso, se trata de una bienvenida "a medias", ya que nuestra nueva directora no es otra que la persona que ha estado sustituyendo a Héctor en el último trimestre, MAITE ROBAINA.
Maite impartiendo el taller "La voz para el coro" durante la I Jornada de Música Coral de Primavera. |
Licenciada en Dirección coral por el Conservatorio Superior de Música de Canarias (sede Gran Canaria), se caracteriza por su juventud y entusiasmo, valores que transmiten al coro en esta nueva etapa un esperado aire fresco y espíritu renovador.
Esperamos que recargue bien las pilas en verano, porque el curso 2015-2016 viene cargadito de trabajo...
¡BIENVENIDA A LA FAMILIA CHELYNA!
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